Lucharon por un España grande.
No soportaban una España títere de otra potencia, no les arredró que fuera la potencia dominante del momento. Quería una España independiente, dueña de su destino y se jugaron la vida. No les importó entregar su vida, a muchos la patria se la pidió, pero el resultado fue la expulsión del invasor.
Hoy España no está invadida físicamente como en aquel momento. Pero sí es una nación títere, títere de las potencias mundiales, de las instituciones mundiales, del nuevo orden mundial. En los institucional Zapatero traicionó lo intereses de España y la dejó a merced de las grandes potencias europeas (cedió sin nada a cambio la minoría de bloqueo), en lo ideológico desde la transición todos los gobiernos han puesto a España al servicio de los intereses de las grandes potencias y de la agenda del Nuevo Orden Mundial. Aborto, ideología de género…
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