SEÑOR RAJOY.

POR: Arsenio del Castillo

DEFENDELLA, Y NO ENMENDALLA

Frase muy conocida como muestra de obcecación, desorbitado orgullo y monumental carencia de nobleza y caballerosidad. Poco duró el Conde Lozano después de abofetear a don Diego Laínez, padre de Rodrigo Días de Vivar. En lugar de pedir perdón desoyendo consejeros amigos manifestó esta frase, su sentencia de muerte a manos del Cid:

Esta opinión es honrada:
Procure siempre acertarla
el honrado y principal;
pero si la acierta mal,
defendella, y no enmendalla.

Así Rajoy, emulando al Conde Lozano ante el fracaso, en las últimas elecciones del 24 M, se ha envuelto en la bandera de la dignidad y orgullo mal entendido y haciendo caso omiso del mensaje de millones de españoles que le regalaron una mayoría absoluta, antes de nada les avisa que él no se marcha, que no dimite. No hay golpes de pecho, actos de constricción, se emborracha con el eslogan de ser la fuerza política más votada en España y quiere que el electorado, cansado hasta la entrepierna de frases manidas, acepte ese “logro”. Ni mucho menos es la explicación a la contundente crítica y mensaje que respalda la pérdida de cientos de miles de votos, eso, si se digna a responder, igual es por plasma.

Ni se da por aludido, ni recuerda lo prometido en su programa premiado con una Mayoría Absoluta. Esta infantil aptitud, según el respetable elector paulatinamente contemple lo que se le viene encima con la llegada de espontáneos sin experiencia pisando moqueta, será penalizada sin miramientos, rigurosamente, sin piedad. ¿Cuántos electores del PP se quedarán en casa en las Generales? El rebelde elector de la Mayoría Absoluta ha votado con rabia, engañado, defraudado, se habla que incluso con odio. Use la socorrida fórmula de “Por motivos personales” y haga un elegante mutis por el foro, pero alivie, aligere a su partido de su poca efectivo, nada brillante trabajo y abra paso a alguien no contagiado de su indiferencia ante problemas que ponen en peligro la unidad de España.

Otro es el respeto a la vida, prioritario para millones de españoles que le votaron por su promesa de reformar una ley creada por alguien que, en su inconsciencia nos aleccionó con: “un embrión era un ser vivo pero no humano”. Reconozco que carezco de estudios de flamencología. Mis estudios de biología, histología, fisiología, anatomía ni mucho menos pueden llegar a ese nivel que otorga la musical especialidad. Por eso, hace tres años, confiamos en Usted, en su palabra y pensábamos que al tener medios y expertos…

Como electores no podemos irnos de rositas.

¡El Bipartidismo ha muerto! ¡Viva el Bipartidismo!
Palabras de ritual en la muerte y continuidad de la monarquía.

Ni hemos protestado adecuada ni suficientemente. Mientras sigamos aceptando votar con la Ley Electoral a medida del bipartidismo y la compra-venta de apoyos de la periferia, seremos solo Esclavos Fiscales.

El Bipartidismo ha sufrido un achuchón pero ahí está. Lenguas viperinas insinúan que las marcas blancas Podemos y Ciudadanos serán absorbidas, volverán al rebaño, a sus orígenes ideológicos, PSOE y PP. Pronto para profetizar, al menos yo, no.

Durante años he finalizado mis escritos con una frase que Catón el Viejo (150 AC) utilizaba como colofón al hablar de Cartago, gran problema para Roma: DELENDA EST CARTHAGO (CARTAGO DEBE SER DESTRUIDO) y me permito transpolar la frase a nuestra realidad.

¡¡¡ DELENDA EST LEY ELECTORAL!!!