por Khaled Abu Toameh
A partir de ahora, las familias de los activistas "pro-palestinos" tendrán que pensar diez veces antes de enviar a sus hijas a los convoyes de ayuda humanitaria.
Mientras que los yihadistas en Siria están importando niñas de Túnez para satisfacer sus necesidades sexuales, sus colegas en Libia están secuestrando y violando a las mujeres.